
Pensamientos nauseabundos atormenban su andar, de lo que pudo haber sido, y jamás fue logrado. El dejo de mirar, con la falsa ilusión de que factores externos desempeñaron un rol siniestro y fundamental en la trama de nuestras vidas. Quizás…, pudo ser, pero ya no fue. Simples actores de reparto en la obra maestra sin final evidente, de la cuál somos parte del elenco, pero jamás actores protagonicos. Quizás…, pudo ser, pero ya no fue!
-Gonza